martes, 30 de septiembre de 2008

Un poco

"Me olvidaba decirte que, que tengo unas ganas de hacerte el amor que no te puedes imaginar, pero esto no se lo diré a nadie, sobretodo a ti. Deberían torturarme para obligarme a decirlo. Que quiero hacer el amor contigo, no una vez sólo, sino cientos de veces, pero a ti no te lo diré nunca, solo si me volviera loco te diría que haría el amor contigo aquí, delante de tu casa, toda la vida"

Me gustan las sesiones de cine que organizamos en mi piso. Le tengo más respeto a los libros que a las películas, y no me importaría copiar ciertas frases del celuloide. Ésta concretamente (de la peli que vimos ayer mis compañeras y yo), la diría ahora mismo, como si fuera mía, y a una sola persona en este puto planeta. Si ya me condené hace meses, poco me importaría que me llevaran presa por plagio...

miércoles, 24 de septiembre de 2008

Suomi...

Hoy he visto tanto en las noticias de mediodía como las de la noche, lo ocurrido hoy en Finlandia. Un tío loco entró en su colegio y empezó a pegar tiros, y ha matado a un montón de personas.
Curiosamente, cuando yo estaba allí, ocurrió lo mismo (en otra ciudad), y como yo estaba totalmente ajena de la realidad (al principio no tenía ni tele ni internet, y no hablo finlandés para leer periódicos, y tampoco conocía a ningún finlandés), mi madre me llamó desde España y me lo contó. Y claro, me quedé impresionada, como me quedo ahora con el mismo suceso, como se queda todo el mundo. Espero que no parezca sádico, pero con esta triste noticia, tanto escuchar "Finlandia" en la tele hoy me ha puesto melancólica. Y siento mucho que sea por este motivo...
Me he dado cuenta de que no han dicho el nombre de la ciudad finlandesa en las noticias (por ejemplo, incluso cuando pasa algo en "un pequeño pueblo de Alemania" dicen el nombre de ese pequeño pueblo). Y es que Finlandia está tan lejos y a todo el mundo le importa un comino (es la realidad, preguntad a cualquiera que os diga un sólo dato de Finlandia que no sea que la capital es Helsinki o que hace mucho frío), que no importa ni decir el nombre de la ciudad. Además, sería un nombre largo o complicado de leer, así que para qué nos vamos a molestar... Pues con este hecho me he dado cuenta de lo lejos que estoy de Finlandia y la he empezado a echar de menos. La verdad, a echarla aún más de menos. No sé si quiero volver, no sé qué es exactamente lo que extraño de allí aparte de las personas con las que viví ese período. No sé si ese país es demasiado tranquilo para mí. No sé si es en gran parte porque tenía como vecino a un chico francés. No sé si ahora me gusta más el frío que el calor. No sé qué hacía allí, por qué elegí ir allí. No sé qué hago aquí.
Y ya me quiero escapar otra vez. A veces pienso que soy cobarde, y otras que estoy hecha para eso (no para ser cobarde, sino para no estar quieta). Ya hay planes pululando por mi cabeza y me tengo que centrar en alguno... Resumiendo, en ocasiones, como hoy, echo de menos a "Finlandia". Y mucho. Son tiempos difíciles, agotadores. A veces desesperantes.

Por cierto, la masacre ocurrió en Kauhajoki (nunca estuve)...

domingo, 7 de septiembre de 2008

Sacudida endémica: la suerte

Tenía que pasar. Pero como ya conozco el tema, la enfermedad no va a durar tanto. Si soy fuerte o débil, ya lo dejo a la opinión de cada uno.
Si tengo mala suerte o no, lo dejo a mi opinión.
Pero basta ya de achacar todo a esa mala suerte. Y si la tengo, puedo vivir con ella, mejor o peor, según el momento. Lo importante es no dejarle demasiado paso libre para que campe a sus anchas en los instantes en los que no presto atención, si es que he tenido tal mala suerte de que esa "mala suerte" me toque a mí.
Como dicen los argentinos, cuyos saberes "a pie de calle" han influído en mí notablemente, "la suerte es para los mediocres". Tanto la buena como la mala. Mediocres con la buena suerte, porque la esperan sin actuar, sumiéndoles en una lamentable vagancia; y mediocres con la mala suerte: rindiéndose a ella, llorando por padecerla y una vez más, dejando de actuar.
Los argentinos siempre me han llamado la atención. Ellos bailan tango cuando están tristes. No son ellos los que precisamente pueden hablar de buena suerte, y por ello la critican en todas sus manifestaciones. Un buen argentino te deseará siempre "Mucha mierda".

Se dice por ahí que "no puedes elegir a tus padres, pero sí a tus amigos". Tanto a los amigos como a los caminos que se escogen en la vida, más general. De esta manera, si tal suerte existe, tú eres el responsable: tú eliges tu suerte. Y como la palabra suerte alberga tanto "azar", personalmente creo que por ella misma, su concepto se limita. A partir de ahora, intentaré rezar a la suerte sólo en mi vicio al Black Jack...
Un buen amigo francés (ya que también es amigo), me dijo que un proverbio chino dice que "siendo amables con nuestros enemigos, les cabrearemos muchísimo". Tengo algunos enemigos a día de hoy, que sólo reciben indiferencia o cortesía por mi parte. Puede que estén jodidos por verme bien, o que ni siquiera se acuerden de que "debemos odiarnos". Yo, por mi parte, sólo espero buenas ideas y que de repente una fuerza y mala ostia inmensas me ayuden a ejecutar la venganza. No es ira y rencor; es una saludable justicia. No es maldad (por mi parte), es de nuevo justicia, equilibrio. Justicia que ya no me preocupa hasta el momento de ser establecida. Puede que yo también tenga mi merecido por parte de alguien, por eso es más deliciosa "la ignorancia del enemigo".

Argentinos, franceses, chinos... Eso no importa mucho. Afortunadamente o no, yo soy española.
Ahora, a seguir, sin prisa pero sin pausa.